Ah! Edgar Sequera...
De todo corazón amé a Edgar Sequera y siempre estuve dispuesto a hacer pr él lo que fuera, aunque estoy consciente que nunca signifique nada para él...conocí a Edgar en el barrio donde me crié y era el prototipo de muchacho, que me hubiera encantado ser: apuesto, atlético, encantador..la verdad no muy inteligente, pero era el galán por excelencia...
nunca entendi como nos hicimos amigos, porque el tenía un amplio círculo de amistades en todo el barrio. Sin embargo, como viviamos en el mismo edificio y alli siempre nos reuniamos un grupo de chiquillos todas las noches, él se acercaba a veces aconversar. Compartíamos las películas, la música y poco a poco me convertí en su confidente. Conocía todas sus historias de amores con las chicas del barrio y lo visitaba con frecuencia en su casa..Ya compartía su alma conmigo, pero moría por verlo desnudo, porque su cuerpo blanco y bien proporcionado me atraía enormemente. Un día no sé ni como, lo convencí de que nos bañaramos juntos...fue una experiencia deliciosa, verlo por fin y tenerlo tan cerca, me excitó tanto que se me paro el guevo inmediatamente y la erección lo asustó y descubrió mi deseo..Se escabulló rápidamente de la situación, dejándome con la sensación de frustración de no haber disfrutado más el momento....
Aparentemente la amistad no terminó, pero poco a poco fui descubriendo que sólo me trataba por interés y que le comentaba a otras personas que yo era marico, un buen día deje de verlo...
En este mismo grupo de chiquillos, conocí a mi gran amigo David. Al principio no lo soportaba porque era muy arrogante e inteligente y lo sentí como una competencia en el grupo. Sin embargo, después me di cuenta que en realidad erámos muy parecidos y trabamos una de las amistades más hermosas que he tenido en mi vida. Compartíamos el gusto por la belleza, el arte, la cultura, la sensibilidad hacia el amor...Me enseñó el camino de la homosexualidad, con su capacidad para arriesgarse desde muy joven a incursionar en el ambiente gay. Definitivamente vivi a través de él, lo que yo no me atrevía a hacer. Conocí a su gran amor, José Rafael, y yo también me enamoré de él. Ellos compartían juntos muchas cosas bellas y me producia envidia no poder vivir algo así..Sin embargo, en muchas oportunidades me llamaban y compartía con ellos, me sentía feliz..Un buen día ellos hicieron el amor por primera vez y no sé exactamente que pasó,pero eso trastocó su hermosa amistad y lo que hasta ahora había sido un sueño idílico, se convirtió en una pesadilla. Tanto David como José cambiaron y poco a poco se fueron alejando hasta distanciarse totalmente. Yo que era el confidente de David, sé que nunca se recuperó de este inmenso dolor y eso lo transformó en un ser profundamente frustado y amargado. Busco refugio en la bebida, las salidas a las discotecas y en innumerables aventuras sexuales, que al final no lo satisfacían...En una de esas salidas paso algo que también cambiaría nuesta amistad para siempre..
Nos encontramos a un hombre muy atractivo en la calle y no sé como se cuadró tener sexo con él. A mi la situación me tomó totalmente desprevenido y me sentí atrapado en ella, aceptando pero con mucho miedo porque yo no tenía experiencia sexual y no me imaginaba en una situación así con David, a quien yo veia como un gran experto. Al final lo que se dio es que cada uno tuviera solo con el tipo. A mi me tocó primero y el hombre lo que queria es que le mamaran el guevo. Lo hice sin sentir ningun placer, porque en mi ingenuidad pensé que la situación tendría un tinte más emocional y resultó ser fría y aburrida. Cuando salí del rincón donde estabamos, David se quedó con el tipo y yo decidí irme a mi casa. Que pasó entre ellos nunca lo supe, pues al dia siguiente cuando hablamos, mi amigo se mostró frío y distante, con su actitud sobrada de siempre y yo me sentí humillado e incapaz de reconocer que no me había gustado, para no pasar por pendejo..Pero apartir de allí las cosas cambiaron entre nosotros y yo fui sintiendo una distancia cada vez mayor. Nunca volvimos a hablar de esto, pero en nuestras vidas apareció otro personaje que terminaría de cambiar las cosas entre nosotros, Eduardo...
De todo corazón amé a Edgar Sequera y siempre estuve dispuesto a hacer pr él lo que fuera, aunque estoy consciente que nunca signifique nada para él...conocí a Edgar en el barrio donde me crié y era el prototipo de muchacho, que me hubiera encantado ser: apuesto, atlético, encantador..la verdad no muy inteligente, pero era el galán por excelencia...
nunca entendi como nos hicimos amigos, porque el tenía un amplio círculo de amistades en todo el barrio. Sin embargo, como viviamos en el mismo edificio y alli siempre nos reuniamos un grupo de chiquillos todas las noches, él se acercaba a veces aconversar. Compartíamos las películas, la música y poco a poco me convertí en su confidente. Conocía todas sus historias de amores con las chicas del barrio y lo visitaba con frecuencia en su casa..Ya compartía su alma conmigo, pero moría por verlo desnudo, porque su cuerpo blanco y bien proporcionado me atraía enormemente. Un día no sé ni como, lo convencí de que nos bañaramos juntos...fue una experiencia deliciosa, verlo por fin y tenerlo tan cerca, me excitó tanto que se me paro el guevo inmediatamente y la erección lo asustó y descubrió mi deseo..Se escabulló rápidamente de la situación, dejándome con la sensación de frustración de no haber disfrutado más el momento....
Aparentemente la amistad no terminó, pero poco a poco fui descubriendo que sólo me trataba por interés y que le comentaba a otras personas que yo era marico, un buen día deje de verlo...
En este mismo grupo de chiquillos, conocí a mi gran amigo David. Al principio no lo soportaba porque era muy arrogante e inteligente y lo sentí como una competencia en el grupo. Sin embargo, después me di cuenta que en realidad erámos muy parecidos y trabamos una de las amistades más hermosas que he tenido en mi vida. Compartíamos el gusto por la belleza, el arte, la cultura, la sensibilidad hacia el amor...Me enseñó el camino de la homosexualidad, con su capacidad para arriesgarse desde muy joven a incursionar en el ambiente gay. Definitivamente vivi a través de él, lo que yo no me atrevía a hacer. Conocí a su gran amor, José Rafael, y yo también me enamoré de él. Ellos compartían juntos muchas cosas bellas y me producia envidia no poder vivir algo así..Sin embargo, en muchas oportunidades me llamaban y compartía con ellos, me sentía feliz..Un buen día ellos hicieron el amor por primera vez y no sé exactamente que pasó,pero eso trastocó su hermosa amistad y lo que hasta ahora había sido un sueño idílico, se convirtió en una pesadilla. Tanto David como José cambiaron y poco a poco se fueron alejando hasta distanciarse totalmente. Yo que era el confidente de David, sé que nunca se recuperó de este inmenso dolor y eso lo transformó en un ser profundamente frustado y amargado. Busco refugio en la bebida, las salidas a las discotecas y en innumerables aventuras sexuales, que al final no lo satisfacían...En una de esas salidas paso algo que también cambiaría nuesta amistad para siempre..
Nos encontramos a un hombre muy atractivo en la calle y no sé como se cuadró tener sexo con él. A mi la situación me tomó totalmente desprevenido y me sentí atrapado en ella, aceptando pero con mucho miedo porque yo no tenía experiencia sexual y no me imaginaba en una situación así con David, a quien yo veia como un gran experto. Al final lo que se dio es que cada uno tuviera solo con el tipo. A mi me tocó primero y el hombre lo que queria es que le mamaran el guevo. Lo hice sin sentir ningun placer, porque en mi ingenuidad pensé que la situación tendría un tinte más emocional y resultó ser fría y aburrida. Cuando salí del rincón donde estabamos, David se quedó con el tipo y yo decidí irme a mi casa. Que pasó entre ellos nunca lo supe, pues al dia siguiente cuando hablamos, mi amigo se mostró frío y distante, con su actitud sobrada de siempre y yo me sentí humillado e incapaz de reconocer que no me había gustado, para no pasar por pendejo..Pero apartir de allí las cosas cambiaron entre nosotros y yo fui sintiendo una distancia cada vez mayor. Nunca volvimos a hablar de esto, pero en nuestras vidas apareció otro personaje que terminaría de cambiar las cosas entre nosotros, Eduardo...